Entrar a un nuevo mercado es entrar a un nuevo mundo, y aunque ya tengamos investigación previa de donde nos estamos adentrando, siempre suele ser un riesgo, en muchas oportunidades solamente es un mercado adyacente muy cercano al que estamos manejando actualmente o complementario, lo cual es una excelente estrategia de expansión, sin embargo, es necesario aplicar algunas tácticas para salir victoriosos.

-Lo primero que debemos tomar en cuenta son varios elementos básicos como lo son: el público al que nos vamos a expandir, la competencia, la demanda y tendencias. Además, debemos puntualizar las fortalezas y recursos que tenemos y que podemos aprovechar para el nuevo mercado, y ya con todo esto planificar un plan de acción.

– Conocer cada detalle del nuevo mercado haciendo un análisis del mismo desde los antecedentes hasta los retos actuales, para de esta manera entenderlos mejor y trabajar con propiedad y eficiencia en el proyecto.

-Hacer un análisis de la competencia es fundamental, y aunque suene obvio muchas veces no se lleva a cabo, esto nos va a ayudar a definir claramente una propuesta única de valor, ver cómo funciona este mercado, a quien nos estamos enfrentando y como diferenciarnos en él.

-Definir los canales de venta, con esto vamos a identificar por donde es más adecuado llegar a nuestros clientes.

Al diversificarnos con un nuevo producto o servicio, hay que desarrollar estrategias distintas a las que veníamos utilizando o actualizar para que cubra efectivamente esta expansión. Tomar en cuenta estos puntos nos será de gran ayuda para ganar el éxito.